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El póster de la versión para cine española: ni "Phantasma", ni "II" |
A finales de los años 70, Stephen King ya estaba labrándose un sólido nombre como escritor de terror, y su novela
Carrie acababa de ser llevada al cine por Brian de Palma. Warner Brothers y el productor Richard Kobritz se interesan entonces por adaptar a la gran pantalla su segundo libro publicado,
Salem´s Lot (en España,
La hora del vampiro) una historia inspirada en
Drácula. El estreno de varios films de la misma temática en aquella época como el remake de
Nosferatu de Werner Herzog y la nueva adaptación del clásico de Bram Stoker por John Badham hacen que la
major se replantee su producción y la enfoque hacia la pequeña pantalla, como una miniserie de tres horas repartidas en dos capítulos. Tras barajarse nombres como George A. Romero y Peter Weir, se acaba escogiendo a
Tobe Hooper –que recientemente había triunfado con
La matanza de Texas– como director del proyecto. El largo reparto combina nombres entonces actuales y populares, como los de
David Soul (de moda gracias a
Starsky y Hutch) o Bonnie Bedelia con veteranos del cine como Lew Ayres, Marie Windsor y el gran
James Mason, este último sin duda uno de los grandes atractivos de la serie.
Salem´s Lot se estrena finalmente en noviembre de 1979 con un aceptable nivel de audiencia y, posteriormente, tres nominaciones a los Grammy (títulos, maquillaje y música) que no ganará. A partir de aquí se inicia la curiosa andadura cinematográfica de la miniserie, pues desde el primer momento se ha concebido su estreno en salas de cine para el resto del mundo (algo muy de moda en la época: recordemos casos como Spider-Man, Hulk o Galactica), en una versión abreviada de menos de dos horas y con escenas alternativas y en general más explícitas. A nuestro país llega en 1982 con el curioso título de… Phantasma II, y eso a pesar de que no tiene nada que ver con la película de Don Coscarelli estrenada el mismo año que la serie original (en Argentina todavía fueron más originales, y la llamaron Las brujas de Salem: La película)… En septiembre de 1985 llega a TVE la versión íntegra de Salem´s Lot, ahora con el título de El misterio de Salem´s Lot, con el que también se conocerá la novela a partir de entonces. Fue en aquel momento cuando la visionó por primera vez un servidor, quien todavía recuerda verla con algún que otro agradecible escalofrío (según leo en internet, se emitió en tres episodios, aunque yo siempre la he recordado en dos, y en los 90, Antena 3 todavía la desmenuzaría más: en cuatro partes).
La intención de los creadores de Salem´s Lot era dar pie a una serie regular –de ahí sin duda ese final abierto–, pero la idea no fructificó. En 1987, Larry Cohen dirigió Regreso a Salem's Lot, una continuación indirecta de la obra de Hooper, y en 2004 hubo un remake de la serie para la pequeña pantalla, Salem´s Lot, con Rob Lowe, Donald Sutherland y Rutger Hauer como principales protagonistas (también en 1988 se estrenó en cines la verdadera secuela de Phantasm, ¡que aquí conocimos como Phantasm: El regreso!).
Siempre he guardado un gran recuerdo y una placenteramente terrorífica impresión de aquel primer visionado de la serie. Algún tiempo después leí la novela, y posteriormente volvía a verla en vídeo, pero creo que en su versión recortada. No ha sido hasta esta misma semana cuando me he podido hacer con el doble DVD de Impulso Records con la edición íntegra de 3 horas (¡de nuevo titulado Phantasma II, que lío!), y he de decir que lo he disfrutado mucho. Para mí, el trabajo de Tobe Hooper no ha perdido interés ni emoción, y me siguen impresionando y gustando la ambientación, sus alusiones a Drácula, Psicosis o The Haunting, las escenas en la Casa Marsten y, cómo no, la aparición del terrorífico e impagable vampiro…
Reggie Nalder
Sin duda entre lo más recordado de El misterio de Salem´s Lot estará para siempre el espeluznante vampiro Kurt Barlow, una sobrenatural criatura de piel azul y ojos amarillos que en realidad estaba estéticamente más inspirada en Nosferatu que en el verdadero personaje de la novela, mucho más humano y parecido al viejo Drácula del libro de Stoker (en este sentido, Rutger Hauer fue visualmente más fiel en el remake de la serie a la creación de Stephen King). Aquel terrorífico ser fue interpretado por el actor Reggie Nalder, no demasiado conocido para el gran público, pero para entonces ya todo un veterano con un gran currículo a sus espaldas (entre otros films, El hombre que sabía demasiado, Casanova de Fellini o El mensajero del miedo). De origen austriaco, la peculiar fisionomía de Nalder (parece ser que se quemó parte de la cara) lo hizo ideal para papeles terroríficos y de villano, y hay que decir que, sin maquillaje, casi daba más miedo que en su mítico papel en la serie reseñada.