Quisiera abrir esta entrada haciendo pública mi gran admiración por la figura de Narciso Ibáñez Serrador, alias "Chicho", ya que lo considero uno de los dos mayores genios (el otro sería Antonio Mercero) que a mi entender ha dado la -con tanta frecuencia mezquina- historia de la televisión de este país.
Probablemente hoy casi todo el mundo lo recuerda por ser el creador de nuestro concurso por antonomasia, el mítico Un, dos , tres... Responda otra vez. Sin duda alguna un programa absolutamente fresco, dinámico e innovador para su época, capaz de aportar como ningún otro alegría y color a raudales en una España triste y entumecida que silenciosamente languidecía en blanco y negro. Pero no debemos de perder de vista el hecho de que el genial concurso no fue la primera prueba que Chicho nos daba de sus capacidades como visionario y pionero sin par de la pequeña pantalla.
Antes ya nos sorprendió con una original serie de TV. Precisamente la que ocupa hoy nuestra querida sección de Series Míticas. Me estoy refiriendo a la interesantísima Historias para no dormir.
Fue emitida a partir de 1966 por Televisión Española. Se abordaba un género, el terror, casi por completo desconocido en el cine o la televisión en la España del momento. La narrativa de terror llevada a la pantalla, si bien contaba con una tradición muy asentada en los países anglosajones o Centroeuropa, apenas había sido tratada en este país. El propio Ibáñez Serrador había hecho algunas incursiones previas en series como Estudio 3 y Mañana puede ser verdad, pero nunca con la profusión con la que se abordaba en el nuevo proyecto, con el que sin duda se convirtió en el auténtico precursor del género dentro de nuestras fronteras.
La primera etapa comenzó con la emisión del capítulo titulado El cumpleaños emitido el 4 de Febrero de 1966 y que fue el único rodado con cámaras de cine en 16 mm y no con cámaras de televisión, por lo que fue pionero en usar esta técnica para una serie de TVE. Era una adaptación de un relato de Fredric Brown y tuvo una menor duración que los siguientes episodios. Para el resto de la serie se mezclaron guiones propios como La alarma o La bodega con adaptaciones de relatos de Ray Bradbury y Edgar Allan Poe como La espera, El cohete o El tonel. Otro episodio destacable fue la adaptación de un relato de Carlos Buiza titulado El asfalto que ganó la Ninfa de Oro al mejor guión en el Festival de Montecarlo. Como en la famosa Alfred Hitchcock Presenta (vista aquí), en ésta Chicho se sentaba al principio de cada episodio realizando un pequeño gag a modo de comentario del mismo, recordando bastante el proceder del célebre Mago del Suspense.
He aquí el recordado opening de esta primera etapa:
La segunda etapa comenzó a emitirse en la temporada 1967-1968 y constó sólo de 8 episodios, a saber: La pesadilla, La zarpa, El vidente, El regreso, El cuervo, La promesa, La casa y El trasplante.
Como continuación en los años 70 Chicho ideó una nueva serie titulada Historias para pensar que se centraría en relatos más profundos e intelectuales. El título le pareció demasiado pedante y decidió llamarla Historias para la noche. Se grabó en 1970 un piloto que no llegó a emitirse titulado El guión basado en una historia de Dalmiro Sáenz e interpretado por Narciso Ibáñez Menta, el padre de Chicho. Al no poder concretarse la nueva serie, Chicho decide rodar otro episodio que se emitiría en 1972, titulado El lobo. Cabe mencionar que entremedias también rueda su primer largometraje, La Residencia (1971), una cinta con una fuerte carga erótica y plagada de escenas que cortan la respiración (sadomasoquismo, necrofilia…) ostentando un estilo que bien recuerda al de las producciones de la británica Hammer.
En 1974 vuelve con otro especial, con uno de los guiones previstos titulado El televisor un recordado telefilme en color con el espíritu de El asfalto o El trasplante interpretado de nuevo por Ibáñez Menta y que el realizador considera su programa favorito de todos cuantos ha hecho.
En 1976 estrena su segundo largometraje, la inquietante ¿Quién puede matar a un niño?. Si bien, inicialmente estaba planeado que no fuese más que otro capítulo de la referida serie (cada uno de los cuales rondaba aproximadamente unos 50 minutos de duración), al final se decidió que, debidio a las posibilidades que ofrecía la historia, fuese un largomentraje independiente de la misma.
En 1982, tras no conseguir el presupuesto necesario para rodar la serie policíaca Cartas al director, Ibáñez Serrador decide recuperar de nuevo Historias para no dormir para una tercera y última etapa en color compuesta por solo 4 capítulos: Freddy, El caso del señor Valdemar, El fin empezó ayer y El trapero. Para abaratar costes se decidió grabar los 4 capítulos en vídeo por lo que se resintió la calidad de los mismos.
En 1982, grabando la presentación de Freedy |
En el año 2000 se anunció una nueva etapa de Historias para no dormir, y como adelanto se reemitió El televisor, con nueva introducción como siempre cómica de Chicho. Aquella emisión fue lo único que se supo de aquella entrega, ya que pasaron los meses y el proyecto no cristalizó en la pantalla.
Más tarde, el 8 de Junio de 2001, en una entrevista en el programa Versión española con ocasión de la emisión de la referida ¿Quién puede matar a un niño?, Chicho comentó que aquello falló porque no pudo contar con directores que quisieran embarcarse en la producción para televisión de los nuevos episodios, ya que su idea no era volver a dirigir él todos los capítulos como en el pasado, y que por eso decidió cancelar el proyecto.
En 2005 se rodaron las Películas para no dormir, un intento de relanzar la idea, a través de una serie de TVMovies producidas por Telecinco y contando con directores de prestigio como Mateo Gil, Jaume Balagueró, Paco Plaza, Enrique Urbizu o Álex de la Iglesia y coordinada por el propio Ibáñez Serrador que dirigiría uno de los capítulos, titulado La culpa.
Por desgracia, queridos amiguitos, actualmente nos basta con ver el Telediario de la noche con su crisis y su prima de riesgo justo antes de acostarnos para tener nuestras contemporáneas "historias para no dormir". Y esas sí que desvelan y meten miedo, oigan. Más que miedo, yo incluso diría PAVOR.
Pues sí que es mítica estas serie y, sin embargo, debo admitir que nunca la he visto. Cuando se emitió la original, yo no había nacido o era muy pequeño. En el 2005 ya había dejado de ver la televisión y sigo así desde hace muchos años.
ResponderEliminarSí que he visto los dos largometrajes de Chicho, y creo que, efectivamente, fue un personaje original y destacable en la televisión española hasta que se centró prácticamente en el "Un, dos tres" y acabó haciéndose un tanto detestable
Ah, también he visto "El asfalto" y me parece muy buena. Ibáñez Menta sí que era grande; siempre recuerdo sus apariciones en "Alucine"
Pues aún a riesgo de parecer hortera, o incluso poco intelectual, personalmente he de admitir que el Un, dos, tres de Chicho y el Verano Azul de Mercero me parecen dos auténticos HITOS (así, con mayúsculas) de la historia de nuestra televisión (y más si los comparamos con lo que se hace en el medio de unos años para acá).
ResponderEliminarY pese a que en su última etapa cayó en un sensacionalismo bastante exagerado, para mí el Esta noche cruzamos el Mississippi de Pepe Navarro fue de lo mejor que ha dado "Telecirco" en toda su pastelosa historia. Al menos fueron tres programas que, cada uno en su época, por uno u otro motivo a mí me engancharon hasta lo indecible.
Lo que me choca, Lord Ruthwen, es que afirmes llevar 7 años sin ver TV. ¿Puedo preguntar que ves entonces?
En realidad más de siete años... Veamos... No la televisión como aparato, sino las emisiones de las cadenas. Veo películas sobre todo, y de vez en cuando alguna serie, pero son compradas, alquiladas o bajadas. Lo que me niego es a tener que ceñirme a horarios, tragarme anuncios, cuñas y demás mutilaciones de una narración audiovisual. Dije "basta" hace mucho tiempo. Y por supuesto me niego a ver telediarios, concursos y programas horteras tipo Ana Rosa o "Gran Hermano". Fíjate que ni siquiera conozco todas las nuevas cadenas de los últimos tiempos...
ResponderEliminarAh, y también voy mucho al cine. ¿Qué mejor lugar para ver una película debidamente?
Me encantaba, y "El televisor", sin duda, mi favorita.
ResponderEliminarOtra que me encantó "Quién puede matar a un niño", pero esta la vi en el programa de José Luis Balbín "La clave". Chicho era un genio, pero su padre no se quedaba atrás.