lunes, 19 de marzo de 2012

SUPERVILLANOS RIDÍCULOS: TURNER D. CENTURY


Imaginad a un criminal ataviado con un retorcido bigote tipo Salvador Dalí y vestido como un histriónico presentador de vodevil de los años 20, carente de superpoder alguno y aún encima sin más fuerza que la propia de un hombre de su edad. Eso sí, el iluminado en cuestión gustaba de ir armado con un paraguas lanzallamas. Si estos datos aún no os parecen suficientes para valorar como es debido a nuestro supervillano ridículo de hoy, añadiré que el tipo solía desplazarse en una extraña bicicleta tándem -voladora para más señas-, aderezada con un nada discreto maniquí (también vestido de dama de época) en el asiento trasero. ¡Buff!. Realmente aterrador, ¿eh?.

Este excéntrico criminal que se autodenominó Turner D. Century era en realidad Clifford Michaels, un individuo que se lamentaba por la pérdida de las buenas costumbres de antaño en la sociedad actual, situación que lo llevó a intentar revivir el pasado mediante una serie de actos delictivos.

Así, comenzó a patrullar la ciudad de San Francisco en busca de aquellos cuya moral había declinado. Al principio, los medios de comunicación le dieron una gran cobertura, debido a su traje colorista, y le hicieron aparecer como un héroe cuando comenzó a actuar contra pequeños delincuentes. Sin embargo, Century decidió que la gente de finales de siglo no podía ser salvada, y decidió abandonar el plan que inicialmente había trazado con Hardy (su mentor) sustituyéndolo por otro de cosecha propia. De este modo, Century planeó provocar una catástrofe similar a la que asolara la ciudad a principios de siglo (el gran terremoto y posterior incendio), para así poder reconstruir la urbe desde cero de acuerdo con sus ideales moralistas, eliminando todo aquello que fuera inmoral, como los bares, Clubs, y los cines para adultos. Vamos, como para soltarlo en Ibiza una noche de verano, ¿no?.


Spiderwoman combatió contra Century, y le siguió el rastro hasta donde Hardy se encontraba. La Mujer Araña le contó a Hardy lo que su pupilo estaba haciendo. Conmocionado, Hardy pidió a Century que cesara su campaña de terror. Sin embargo, en la lucha entre Century y Spiderwoman, el criminal usó un cañón de fuego, provocando un incendio en la mansión. Hardy estaba tan disgustado por que Century había arruinado su sueño, que prefería morir. Century dijo entonces que quería tanto a Hardy, que no podía permitir que muriera solo, y se negó a abandonar la casa. Spiderwoman logró huir de la mansión en llamas, y se marchó creyendo que ambos habían muerto.


Sin embargo, aunque Hardy efectivamente pereció en el incendio, Century logró escapar y marchó a Nueva York, ciudad que -como no- consideraba decadente. Una vez en Nueva York, Century planeaba utilizar una máquina de su invención, la cual lanzaría ondas ultrasónicas que acabarían con todos aquellos de una edad menor a sesenta y cinco años, pués Century consideraba que los mayores de esa edad eran nacidos en una época "de moralidad". Frente a Century se alzaron Spider-Man y Dominic Fortune, que obviamente lo derrotaron. Más tarde se demostraría que la máquina funcionaba mal y solo provocaba un estado de inconsciencia transitora.


Century fue encerrado en una institución mental, de la cual pronto logró escapar. Convertido en un fugitivo y un fuera de la ley, se vio obligado a aliarse con otros criminales. En contacto con este colectivo, supo de la existencia de un justiciero enmascarado llamado Azote, que mataba a criminales como el propio Century. Nuestro amigo aceptó acudir a una reunión que debía llevarse a cabo en el Bar sin Nombre, un bar de Medina County, Ohio, en el cual se reunían criminales. En esta reunión, a la que acudieron casi una veintena de supervillanos, debía decidirse las acciones a llevar a cabo para acabar con Azote. Lo que ninguno imaginó era que el justiciero había acudido a la reunión disfrazado de camarero, y aprovechó la sorpresa para acribillar a balazos a los presentes matándolos a todos, Turner D. Century incluido.

7 comentarios:

  1. Pues si que es un personaje pintoresco y ridiculo... no me extraña que no cuajara como villano.

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  2. ¡Una serie divertídisima y sin desperdicio! La verdad es que encuentro el mundo del cómic de superhéroes un tanto decadente en general, y eso que yo fui un gran fan en mi juventud...

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    1. En muchos aspectos tre concedo lo de decadente. En cualquier caso, tiempo al tiempo. Quizá no tardaré mucho en rabautizar esta serie como "Supervillanos mortíferos", mostrando la otra cara de la moneda, y entonces comprobaréis como de todo hay (penosos unos, aterradores otros).

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  3. En cualquier caso, me declaro desconocedor de casi todo el panorama superheróico de las últimas dos décadas, pero sí que encuentro, no sé, quizá la palabra más correcta sea "desfasados" a muchos de los personajes (buenos y malos) creados en los años 60 por Lee, Kirby y compañía, y mira que les tengo mucho cariño. Pero, no sé, gente que se pone trajes llamativos y nombres aún más chocantes y empieza a patrullar las calles, o, por el contrario, a asolarlas... ¡Y los poderes tan divertidos que tenían!

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  4. Estoy de acuerdo contigo en que muchos conceptos se han quedado bastante desfasados para la mentalidad de hoy (mira por ejemplo como visten los X-Men en las películas y como lo hacían hasta entonces en los cómics), sin embargo, y aunque pueda sonar un poco contradictorio, para mí la Marvel que merecía de verdad la pena abarcó desde los primeros sesentas hasta los últimos ochentas. Después de eso, y salvo alguna que otra honrosa excepción (pocas, la verdad), para mí los productos de la casa (y de la industria en general) perdieron muchísimo fuelle. Supongo que nunca acabé de digerir del todo bien esa adaptación a los tiempos de hoy...

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  5. ¡Esa fue la época en que yo disfruté sus cómics! Pero más recientemente, hace unos años, intenté volver a leer los primeros de La Patrulla-X y no pude con ellos...

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    1. hace unos años, intenté volver a leer los primeros de La Patrulla-X y no pude con ellos...

      Es que esa etapa se hace bastante "infumable" por simplona (y conste que también tengo ese material en un sitio de honor de mi colección, ¿eh?), pero considero que se realizó en una época donde la edad media del lector medio era aproximadamente de 10 a 15 años inferior a la del lector medio de hoy. Te aconsejo que en lo que a la Patrulla se refiere, pruebes con La Imposible Patrulla-X tomos Marvel Gold 1 y 2 de Panini. Luego me cuentas...

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